"Tienes que crecer, que madurar, dejar de vivir en el aire y aterrizar en el terrible, duro y frío suelo en el que vives. No importa tu personalidad, tus sentimientos ni tus putas aflicciones. Vive el aqui y el ahora, es lo único que tienes." Ese es el karma que cargo día tras día, o mas bien que trato de cargar. Solo basta parar y detenerme un momento, para olvidarlo y empezar a recitarlo una vez mas.
La primavera ha llegado y aún no se siente de esa manera. La vientos se mueven a su placer, la nieve viene y va, y la gente acepta feaciente el día presente. Los dias parecen pasar, aunque permanezcan estáticos ante nuestros ojos cansados. Amaneces junto al crepúsculoy el tratamiento empieza, la búsqueda diaria da inicio mientras que tu mente se llena de todo lo que alguna vez pensaste huir y tus pensamientos se concentran en solo una cosa.
Años han pasado desde la ultima vez que te vi. Usabas tus jeans favoritos y esa camisa desarrapada que tanto odiaba. Caminaste hacia mi y me calmaste un poco diciéndome que todo saldría bien, que tu no me soltarías, pero me engañaste. Sabías que algo estaba sucediendo pero aun así lo ocultaste, siempre me consideraste débil, pero no te culpo; yo actué de esa manera desde el principio. Nos recuerdo huyendo, corriendo hacia la nada para deshacernos de nuestro tiempo tan fijado y de nuestro espacio tan finito. Sin embargo, el mundo no queria tratos y acabamos sintiendo ese respiro final a las puertas del abismo donde caíste por siempre.
